También llamado aceros antidesgaste, estos aceros pertenecen a la familia de los aceros martensíticos y contienen un % de Cr mayor a 2% y un % de Mo máximo de 0,34%, el cual entrega una particularidad única en cuanto a microestructuras, pudiendo gracias al tratamiento térmico de temple y revenido, estabilizar la fase de martencita revenida. Lo anterior quiere decir, que el material que comprenda los rangos de composición química de la norma interna indicada como FR[1]A70, tendrá la capacidad de trabajar en ambientes que soliciten resistencia al alto impacto y resistencia a la abrasión. El porcentaje de carbono es superior a 0,6%, considerando además los elementos aleantes adicionados, permite un cálculo de carbono equivalente superior a 0,45%, lo que implica que la soldabilidad de este material es garantizada bajo condiciones explicadas en el PROCEDIMIENTO DE SOLDADURA PARA ACEROS CON CE MAYOR A 0,45. “Estos materiales son utilizados principalmente en la industria minera para fabricación de revestimientos, chutes alimentadores, máquinas de movimiento de tierras, cargadores, tolvas, elevadores, chutes dosificadores, y más… ” La calidad de la pieza es entregada con Tratamiento térmico de temple y en ocasiones se realizan revenidos. Son aleaciones que se pueden mecanizar después de ser tratadas. Su dureza Brinell después del tratamiento térmico puede llegar a 400-500 HB y son materiales que poseen propiedades magnéticas.